Los foros, juego de troles
Cuando hablamos de Social Media, en lo primero en lo que pensamos es en Facebook, Instagram, Twitter, Linkedin. Pero nadie piensa en los grandes olvidados: los foros. Y caemos en el error de no hacerlo, ya que antes que las redes sociales, ellos ya estaban, incluso mucho antes que los blogs y demás plataformas sociales.
Seguro que alguna vez has preguntado a Google por algún problema o quebradero de cabeza que no te deja dormir. En el 90 % de las búsquedas que hiciste, acabaste en algún foro en busca de la solución de algún usuario experto.
En ellos, has encontrado respuestas de todo tipo: respuestas idiotas y absurdas hasta respuestas que han podido sacarte de alguna duda. Los foros son una importante herramienta de comunicación e interacción. Sin embargo, este afán colaborativo puede llegar muy lejos por eso, los foros son una herramienta muy poderosa, tanto que puede repecutir en las ventas de un empresa o derrumbar un programa.
¿Qué pasa cuando los colectivos que forman parte de estas redes toman conciencia de su poder?
De la misma forma que existen usuarios reales también existen trolls, y con estos últimos hay que tener cuidado. Pues son perfiles que se dedican a hacer spam, generar un mal ambiente entre los usuarios del foro y boicotean temas serios. Y aún así, siempre se escudan en la libertad de expresión.
El más conocido es Forocoches.com, el lugar ideal para que las empresas puedan hacer marketing de guerrilla. Su diseño es más bien poco atractivo, incluso algo caótico. Y sin embargo, busques lo que busques siempre está en los primeros resultados de búsqueda en Google. Forocoches es potente por su comunidad.
Divertido, anónimo, sin moderadores y con total libertad de expresión. Forocoches se ha convertido en el punto de información y debate de muchos internautas en el mundo que lo visitan a diario, casi como si fuera una red social tipo Facebook. Pero también el lugar donde los usuarios hablan y se ríen de todo
En forocoches, todo es fugaz. Un tema puede correr como la espuma y convertirse en viral en cuestión de segundos. Según de qué hablemos, esto es una característica positiva, pero no siempre es así. El Tekilaso es una de las últimas guerras que lleva el nombre de Forocohes. Esta última tuvo lugar en el programa de Telecinco 'Got Talent'. Los forococheros se organizaron (una vez más) para votar masivamente al candidato más polémico: El Tekila. ¿El objetivo? Echarse unas risas y ridiculizar a Risto Mejide y al programa.
Y así fue como una gran comunidad de usuarios se compincharon y proclamaron ganador a lo que Risto Mejide definía como "una payasada", abandonando el plato. Generó tanta polémica y audiencia que Forocoches reivindicó su acción a la que denominó El Tekilaso .
Cabe preguntarse cómo una empresa como Telecinco no contaba con un sistema de seguridad en Internet para impedir estas votaciones amañadas. Bastaba con introducir un simple captcha o que el script del cliente recogiera más información del usuario, teniendo así una huella digital del dispositivo que vota más completa.
El sistema de votaciones consistía en que cada usuario solo votaba una vez, recogiendo la IP externa. Sin embargo, esa validación del voto se hacía antes en el navegador del propio votante, por lo que era sencilo engañar al sistema de Telecinco y repetir la acción en bucle, multiplicándose el número de votos.
No eran los Óscars, cierto es. Pero hablamos de un programa de televisión donde sí habia concursantes que se tomaron muy seriamente su actuación y su talento. Donde había meses de esfuerzo y entrenamiento que se fueron al garete en unos segundos. Y eso, precisamente, justo y moral no es.
Sin embargo, éste no es el único caso. Ejemplo de ello es lo que ocurrió en la elección del candidato español al Festival de Eurovisión en 2010, en el que el voto en masa logró colar entre los finalistas a John Cobra, un personaje peculiar que ridiculizaría nuestra imagen y nuestro criterio musical.
En definitiva, no podemos perder de vista el poder que los foros. Debemos ser conscientes de su importancia como herramienta de comunicación, debemos conocer los peligros y sobre todo debemos saber utilizarlos y estar alerta siempre. Nunca sabemos quien está al otro lado de la pantalla.
Fuente imágenes: La vanguardia
